martes, 27 de noviembre de 2007

"Todos contra Evo" de Abel Ortiz

La universidad de Oxford acoge conferenciantes negacionistas; nazis. Que extrañas sincronías. En estos días un fantasma del KKK recorre España presentando un libro antisemita. Periódicos alemanes evidencian lo que ya se sabía; la policía de la república federal recicló antiguos SS en funcionarios demócratas, hasta los ochenta, incluyendo cargos de máxima responsabilidad. Paul Dickopf, de la gestapo durante la guerra, de la CIA después, fue presidente de la policía federal y de la Interpol. En su pueblo tiene dedicada una calle. Las raíces pardas de la democracia salida de Nuremberg.

El abogado Horst Mahler fue el único superviviente entre los fundadores de la fracción del ejército rojo, la baader-Meinhoff, exterminada, suicidada, en las cárceles de los setenta. En los noventa defiende al NPD, nazis, y recientemente es condenado por hacer el saludo hitleriano en público.

A pesar de toda esta campaña, premio Nóbel racista incluido, para televisiones, radios y periódicos los malos siguen siendo los indios; Evo, Chávez, Correa. En Santa Cruz, la región más rica de Bolivia, con enormes bolsas de gas, agitan las aguas contra Evo. Piden autonomía. En realidad quieren explotar el gas sin interferencia del gobierno. El presidente del Comité Cívico santacruceño acusa a Evo y a su gobierno de promover el tránsito a un gobierno totalitario, de buscar la confrontación racial, de utilizar una violencia solo vista en gobiernos de tiranos. El presidente del comité cívico santacruceño no es indio, como habrán sospechado. Se llama Branco Marínkovic, es licenciado en economía y finanzas por la universidad de Texas, director del Banco Económico y dueño de catorce mil hectáreas con una laguna dentro. Sus padres llegaron desde Yugoslavia en los cincuenta, perseguidos por el comunismo según la versión oficial. El tipo compara a Evo con Hitler. Todo vale.

Otro de los cabecillas de la oposición, el jefe de Unidad Nacional, Samuel Doria, se dirigía a Sucre en el momento de máxima tensión con la constituyente rodeada, las comisarías ardiendo, tres muertos en la calle y cientos de heridos. La policía paró su coche. Llevaba una ametralladora uzzi de fabricación israelí y munición abundante.

Morales está sentenciado, no le dejarán escapatoria, lo han hecho muchas veces antes. Es indio y es pobre; Nunca pisará Oxford.