lunes, 16 de mayo de 2011

Por qué LO ROJO ES VERDE y vice-versa

"No es posible conseguir mediante reformas que se convierta en amigo de la Tierra un sistema cuya dinámica esencial es la depredación creciente e irreversible. Por eso, lo razonablemente reformista es, también en esto, irracional".

Manuel Sacristán Luzón.


No se trata, [dice EQUO], de estar a la derecha o la izquierda de IU. En algunos de sus postulados, afirman, son más "radicales".

"La izquierda clásica, por ejemplo, ha sido muy desarrollista. Nosotros nos situamos en parámetros diferentes, en la conquista de un modelo de crecimiento no ilimitado".

¿La izquierda clásica ha sido desarrollista? ¿La izquierda española ha sido desarrollista? ¿Dónde, cuándo? ¿Ha tenido poder para ello en alguna ocasión? ¿Cómo se puede afirmar una cosa así cuando esa izquierda “clásica” ha contado con uno de los pensadores ecologistas más brillantes no sólo de España sino de Europa? ¿No hablaba Manuel Sacristán a finales de los años setenta, hace más de 30 años, de una política científica de orientación socialista que no sólo no abonara el desarrollismo sino que combatiera contra él?
Salvador López Arnal

viernes, 13 de mayo de 2011

Es la economía política


Lo más preocupante no es que el PSOE de Zapatero haya llegado a un nivel de negación de la realidad alarmante -comprensible en lo que respecta a sus bases, que lidian como pueden la tremenda disociación cognitiva entre su ideario y la práctica política de su partido- (por cierto, Llamazares siempre al quite, muy bien: efectivamente todos somos bellacos --para más señas somos, como mínimo, cinco millones de bellacos).
Tampoco es de lo más preocupante que la Telemadrid de Espe, por obra y gracia de Isabel San Sebastián, haya conseguido radiar en unos pocos segundos la mejor confirmación a posteriori que Naomi Klein jamás pudo soñar para su último libro.
... ni tampoco que un tertuliano de TVE considere las abstractas pero incuestionables declaraciones de Jose Luis Sampedro como añejas y vacías declaraciones "flower power" [sic].

Me preocupa más, a largo plazo, que se perpetúe en las formas, la estética, los discursos, la imagen de la economía crítica como poco más que un vacuo e inocente "humanismo", un discurso meramente poético, alejado de todo vínculo con la economía "seria" y "científica". (Por supuesto que Sampedro por "humanismo" entiende mucho más que eso).
En la tertulia de 59 segundos la cháchara (los franceses dicen "bli bli bla bla") posterior a la entrevista a Sampedro no sólo incluyó esas palabras de desprecio hacia el ex-catedrático de estructura económica: lamentablemente, las ilustró.

De hecho, la imagen de los contertulios escenifica a la perfección ese enfoque ideológico que enmarca la percepción que el electorado tiene de la economía: la ciencia está de parte de aquellos situados en la derecha: (hacen que) saben mucho de mercados, hedge funds y manos invisibles, y además ¡van encorbatados! mientras que enfrente, insegura, la supuesta izquierda social-liberal sólo puede aportar al debate una tibia ristra de "valores" que, se temen, en última instancia sólo pueden postergarse ad infinitum, pues la aplicación de esos vaporosos ideales solamente puede encomendarse a "nuestros científicos", verbigracia: Solbes & compañía (Sevilla, Sebastián, Boyer, o ya en último caso, incluso Niño Becerra -- un caso interesante es el de Mas-Colell). Y desde sus manantiales sulfurosos, esos oráculos les devuelven año tras año a la única realidad: los mercados.
No hay ciencia fuera de los manuales de Deusto, CEU o el ICADE: no hay reformas posibles que no sean solubles en el compuesto neoliberal.

Pues no. No sólo, en su sencillez, Sampedro dice verdades como puños: además es que, como en su momento denunció Peter Jager, que eso sea algo parecido a "ciencia", está por demostrar.

No hace falta invocar aquí toda una inmensa tradición de economistas marxistas más o menos heterodoxos que, desde estándares tanto o más científicos que los economistas mainstream, llevan trabajando decenios en estudios rigurosos que echan por tierra muchos mitos liberales, muchas veces llegando a ser -a regañadientes- reconocidos en sus respectivos campos (Joan Robinson, O'Connor, Sweezy, Baran).

No hace falta; basta remitirse al creciente número de economistas que desde muy diversas posiciones están rebelándose contra la hegemonía académica y social de una eco-nomía liberal que tiene más de arte de birlibirloque que de nómos.
[Como muestra Lavoie (libro a la derecha, La economía postkeynesiana) en un denso pero instructivo repaso, hay una gran variedad de enfoques que con notable solvencia han ido ilustrando las debilidades teóricas (epistemológicas y ontológicas, además de metodológicas) de gran parte de la economía monetarista ortodoxa].

No; como reza el subtítulo del libro de Jacques Sapir, en los "falsos expertos" de la economía puede que no sólo haya debilidades teóricas: además hay muchos secretos inconfesables.

Y porque Akiro no me permitiría acabar éste apresurado relato con tanto keynesiano (no me refiero a Sapir, por supuesto), aprovecho para recordar no sólo el trabajo personal de uno de nuestros grandes economistas marxistas, Diego Guerrero, sino también la espléndida colección en la que han aparecido sus dos últimos libros, editorial Maia.
[Ruego se dirijan a este blog los editores, para poder darles la dirección a la que enviar los ejemplares de cortesía :-p ]

viernes, 6 de mayo de 2011

La derecha homeopática y Bildu

¿Por qué es necesario combatir el pensamiento mágico?
Bueno, hoy se me ocurre otro ejemplo. En todo el mundo, incluido el Reino Unido, lleva años infiltrándose en nuestros sistemas de salud una pseudomedicina que se basa en una serie de presupuestos muy curiosos.

Dejaré al gran James Randi que los explique por mí:

http://amazings.es/2011/02/09/james-randi-explica-la-homeopatia/

En todo caso uno de los más importantes es que

la forma más habitual de preparación de una dilución homeopática es la siguiente: se coge 1 ml de la sustancia original (“tintura madre”) y se mezcla con 99 ml de agua. Se agita este preparado y se obtiene una dilución de 1 CH (Centesimal de Hahnemann). A continuación, se coge 1 ml de este producto y se repite la operación; así se consigue una dilución de 2 CH. Como se puede deducir del apartado anterior, cada vez que se realiza una de estas mezclas, la sustancia original queda diluida 100 veces más en el preparado final. Se supone que estos productos son más efectivos cuanto más diluidos están [!!!]. Un simple cálculo permite saber que una dilución de 12 CH no contiene ya ninguna molécula del principio activo. Es, en otras palabras, simplemente agua. No es raro ver medicamentos homeopáticos con diluciones de 30 CH.
[fuente: queeslahomeopatia.com]

Donde entra el pensamiento mágico es a la hora de afirmar que el compuesto original (supuestamente curativo, aunque eso tampoco es cierto en nuestro universo), pese a no estar ya presente en la mezcla, sigue estando activo. Entre otras cosas porque el agua "tiene memoria".

El caso es que si diluimos HB en 99 partes de EHAK, EHAK en 99 partes de ANV, ANV en 99 partes de Sortu, y Sortu en 99 partes de Bildu, hay gente que sigue afirmando que Bildu es HB. Y por supuesto, cuanto más diluido, más peligroso es. Por eso, en realidad, para ellos Bildu es ETA...



[Me avisan de que Isaac Rosa publicó un comentario muy parecido hace unos días, aunque desde luego más incisivo (y oportuno). Por si se siente ofendido, antes de borrar el post pongo aquí un enlace a su artículo:
http://blogs.publico.es/trabajarcansa/2011/04/28/homeopatia-en-las-listas-de-bildu/ ]

domingo, 1 de mayo de 2011

Bin Laden ha muerto. Hammurabi en la Casa Blanca

Sentimientos encontrados.
El líder del grupo terrorista más grande del mundo ha sido eliminado, bien, vale.
Pero uno no puede dejar de sentir -como mínimo- incomodidad al ver al presidente de un país que se dice democrático (y cristiano) vender un asesinato como "justicia" y como una victoria.
No sólo es un discurso abyecto de venganza, sino que incluye -demasiados- pasajes siniestros:
"Let us remember that we can do these things [actuar como policía global, más allá de leyes y convenciones] not just because of wealth or power, but because of who we are: one nation, under God, indivisible, with liberty and justice for all"

"No Americans were harmed. They took care to avoid civilian casualties" [Es decir: no murieron americanos, y han INTENTADO que no mueran civiles. Si no hay bajas civiles no se resume afirmando "se intentó que no murieran civiles". Creo que queda bastante claro. O le falló algún asesor o realmente... le da igual]

Y el momento de colapso moral:
"And on nights like this one, we can say to those families who have lost loved ones to alQaeda’s terror: Justice has been done."


Tremendo.

No esperaba éste discurso. Realmente me ha sorprendido.